Un estilo de vida saludable, combinado con los cuidados básicos de la piel descritos anteriormente, puede hacer maravillas con su piel. Llevar un estilo de vida que ayude a la piel a mantener un aspecto juvenil no es nada difícil.
Recuerde hidratar su cuerpo: Bebe de 6 a 8 vasos de agua al día para mantener tu piel sana y firme. Controla tu consumo de alcohol y cafeína, que tienen un efecto deshidratante.
Evite el azúcar y los productos con un alto índice glucémico: Cualquier hombre que sea un glotón de los dulces debe saber que el exceso de azúcar es tan malo para la piel como para los dientes. Comer demasiados alimentos con un alto índice glucémico puede provocar inflamación en el organismo y agravar afecciones como el acné y el eczema.
Comer mucha fruta y verdura: La fruta y la verdura frescas contienen una dosis saludable de antioxidantes que ayudan al organismo a combatir los radicales libres y a prevenir el envejecimiento. También son una fuente de vitaminas muy necesarias que mantienen la piel sana y brillante. Así que es hora de convencerse del brócoli y las coles de Bruselas.
Dormir lo suficiente: Un buen y profundo sueño diario puede hacer mucho para mantener un cutis saludable y prevenir las ojeras y las bolsas bajo los ojos. Cuando dormimos, nuestra piel se regenera, y la falta de sueño puede interrumpir su proceso de renovación.
Evite el estrés en la medida de lo posible: el estrés provoca la secreción de cortisol, que conduce a la inflamación del cuerpo. El cortisol también aumenta la producción de sebo por parte de las glándulas sebáceas, lo que puede desencadenar el acné.
No fumes. Fumar reduce el flujo sanguíneo y la producción de colágeno, lo que es muy malo para la piel. No fumes y tu piel te lo agradecerá siempre.